Si el boom de las bicicletas fue un fenómeno a nivel mundial, el de las eléctricas aún en mayor medida. “A día de hoy las bicis eléctricas han llegado para quedarse”, asegura Óscar, de La Fuga Cycling. “Son una maravilla, te desplazas a toda pastilla, hasta 25 kilómetros por hora, y no tienes más gasto que el de la corriente”, explica.

Además, Marcos Losada, de Bike One, asegura que “las eléctricas están haciendo que mucha gente que no está en forma o gente mayor que antes cogía una bici y cuando pedaleaba cuesta arriba se cansaba, se agobiaba y empezaba a subir de pulsaciones, usa la eléctrica y ve que puede seguir en cuesta a un ritmo normal, sin empujar con las piernas”.

“Yo mismo cuando salgo de ruta los domingos con más ciclistas, veía gente de 70 años que no daba acabado la ruta, o que la acababa pero ayudado por otro, a remolque, teniendo que esperarle; ahora con una bici eléctrica pueden ir con todo el mundo sin problemas”, ejemplifica. Así, “disfrutan de la bici de otra manera”, expone.

Y nombra como otro factor a tener en cuenta la mejora y la novedad del mundo eléctrico. “Igual hace diez años ya empezaba a haber bicis eléctricas, pero en estos últimos cuatro la cosa ha evolucionado de forma muy significativa y la gente se interesa cada vez más”, asegura Marcos.

FINANCIACIÓN DE HASTA EL 50 % DEL VALOR TOTAL. Hace dos semana, el Consello de la Xunta aprobaba la concesión de ayudas para la compra de este tipo de bicicletas, para tratar de fomentar una movilidad urbana sostenible. Hasta el 1 de agosto no se pone en marcha el plan de ayudas, pero son muchas las personas que ya han llamado a las tiendas interesándose por comprar estas bicis con la ayuda.

Cabe recordar que hasta el 50 % de las bicis se financia con esta subvención, que puede llegar a los 500 euros para la población general (en caso de que la bici cueste mil); a los 600 para las familias numerosas y hasta 700 para las de régimen especial.

“Ya nos están reservando bicicletas para el 1 de agosto, que es el mismo día en que empieza la campaña”, asegura Óscar. A la tienda de Marcos “vinieron a preguntar como unas 20 personas”. Aunque aún están en contacto con las asesorías para que les expliquen bien cómo funciona el tema: “Supongo que será como en las demás subvenciones, tú adelantas el dinero y después la Xunta te paga”.

Además, Marcos puntualiza que “no vale cualquier bici”, pues “solo entran en la subvención las bicis enfocadas a la movilidad urbana, con guardabarros, luces, pata, no las de uso deportivo.

Habrá que ver si con estos impulsos por parte de la Administración autonómica se consigue cambiar el patrón de movilidad español. Tal y como expone Marcos, “en España el 80 % del uso de la bici es deportivo, mientras que solo el 20 % es para la movilidad urbana, para ir a trabajar y demás”. Sin embargo, “en los países nórdicos, donde la bici lleva asentada mucho más tiempo, los porcentajes son a la inversa: el 80 % del uso de la bici es para movilidad urbana, para uso diario, para salir a comprar, ir a un recado o al dentista, y el 20 % para uso deportivo”.